Una vez un aspirante fue a ver a su posible Guru. Cuando llegó al lugar indicado, encontró a una persona trabajando en el jardín y le preguntó acerca del Maestro. La persona le dijo que entrara en la casa. Al entrar, vió a la misma persona vestida como el Mentor Espiritual. No podía comprender cómo un Gran Maestro era capáz de trabajar en el jardín como una persona ordiaria. Se sintió perplejo al ver al infinito e ilimitado apareciendo como finito y limitado.
(Libro la canción de su vida)
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